Kyle-sama c28

Ojo, este capítulo contiene escenas algo subidas de tono, no lo considero +18 pero sí +15.

Notas de la autora: revisé la conversación casual de ayer. Quería escribir oraciones más fascinantes, pero ese fue el límite. Mi fortaleza mental es solo… Pero, esto quedo un poco mejor.

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Capítulo 28: Incluso en momentos como este, los chicos serán chicos

Solo lo pensé por muy poco tiempo. Antes de que me diera cuenta, ya estaba corriendo.

Cuando llegué a la oficina de Brad, junto a mí estaba Louis con un rostro descolorido. Debido a que también tenía la respiración agitada, asumí que vino corriendo conmigo desde la cafetería.

Ni siquiera lo vi.

¡Como sea, ahora es más importante rescatar a Angélica de ese pervertido!

Estaba a punto de entrar imprudentemente, pero Daniel colocó una mano sobre mi hombro y me detuvo.

—Entraré primero y neutralizaré las herramientas mágicas en su interior. En ese momento, por favor procedan. Tengan la cortesía de priorizar el rescate de sus seres queridos, señores.

Me sentí seguro tras ver el rostro impasible de Daniel.

Cuando asentimos en silencio, Daniel tocó educadamente la puerta, dijo «con permiso» y la abrió.

Un extraordinario ruido de algo crujiendo provino desde la puerta.

Ah, estaba cerrada… Pensé que no lo estaba, ya que Daniel lo abrió de forma tan natural y sin emplear mucha fuerza…

Daniel ingresó y prosiguió. Desactivó las herramientas mágicas colocadas en el vestíbulo y en silencio abrió las puertas hacia la recamara.

Luego, la escena en su interior se extendió frente a nuestros ojos…

Tras verla, sentí un escalofrío.

Jackie se encontraba desnudo y amarrado en el suelo. Luego, estaba Jessica, quien se retorcía y lloraba en el piso mientras se desvestía confundida.

Michelle era sujeta por Brad y gritaba por ayuda a Jackie. Tenía el uniforme roto y Brad acariciaba sus pechos.

Entonces, Angélica…

Estaba atada de pies y manos, la habían puesto en un lugar desde dónde se podía ver todo. No le habían hecho nada a ella salvo porque estaba amordazada…

…Aunque nos encontrábamos en una situación crítica, terminé pensando «Me alegro que no tocara a Angélica». Soy una basura…

Sin expresar eso en voz alta, corrí al lado de Angélica y la desaté rápidamente. Sin decir una palabra, simplemente la abracé con fuerzas, tratando de no revelar mi expresión terriblemente distorsionada.

Por favor, no me veas, soy una basura que solo piensa en ti…

—…Ah… ¿Ky-kyle…sa-sama?

Ya que solo la abrazaba con fuerzas sin decir una palabra, Angélica dijo en voz baja. Me enojé conmigo mismo por fallar en protegerla y la sujeté aún más fuerte.

Hubo varios quejas de “ugh” y ruidos violentos, pero no pensé en revisar. Dejé que Daniel se encargará de Brad. Por lo que no tenía nada de qué preocuparme.

¿Me pregunto por cuánto tiempo abrace a Angélica?…

El misterioso flujo de tiempo pudo haber sido de una hora o un minuto. Antes de darme cuenta, Angélica dejó de temblar.

Sin embargo, todavía siento pequeñas vibraciones…

Fue entonces que noté que era yo quien temblaba.

Debo haber estado aferrado sobre Angélica, no abrazándola.

Qué patético soy.

En momento como este, tengo que ser quien la consuele…

Abrí la boca para hablar, pero nada salió. Mi mente se puso en blanco tras ver que se encontraba a salvo. Al ser incapaz de decir algo, no pude evitar reír amargamente conmigo mismo quien era un bueno para nada.

Si ya soy un bueno para nada, ¿no estaría bien ser más patético ahora?

Aflojé un poco mis brazos, ante lo cual Angélica me miró intranquila. Luego, la besé en la frente y contemplé sus ojos.

—¿Por qué sucedió esto?… Si algo te llegara a pasar, Angélica… Me moriría. Así que, por favor… ¿cuídate? Me alegro… realmente me alegro… de que estés bien…

La recriminé por mis propios errores de una manera desagradable. Aunque no pude decir nada para consolarla, sí podía decir tales cosas patéticas.

Sin embargo, ella no mostró desaprobación, gentilmente inclinó su frente contra la mía y sonrió. Cuando pensé que esa sonrisa se acercó más, sentí una sensación de algo suave sobre mis labios.

Ante el repentino ataque, mi racionalidad salió volando por la ventana cuando por fin entendí que se trataba de un beso. Perseguí esos labios efímeros y firmemente me aseguré de ellos. Solo así, invadí su inocente y pura boca.

—Um… Umm.

Escuché gemidos sofocados, pero no podría importarme menos. A ella, cuyas piernas se habían debilitado, devoré esos lindos labios.

Toda la tensión se desvaneció con ese beso. No me afectaba donde o en qué situación nos encontrábamos.

Generalmente, me contenía con mi racionalidad; pero, ahora nada podía detenerme.

Los brazos que la habían estado sujetando comenzaron a moverse lentamente hacia abajo…

—Su alteza, es suficiente.

Creí que no había nada que pudiera detenerme, pero… no contaba con que Daniel también estuviera aquí.

Sintiendo esa mano sobre mi hombro y tras escuchar esa fría pero estricta voz, recuperé la compostura. Una parte de mí estaba decepcionado; pero liberé sus labios, tras lo cual un hilo transparente se formó entre nosotros. Con una expresión desenfocada, ella me miraba extasiada.

Mi emoción se avivó aún más con eso; pero, para detenerme, la acerqué a mi pecho para que no pudiera verla.

Luego, a fin de verificar que los demás estuvieran bien, di media vuelta.

Allí vi a Jessica, quien ahora tenía puesta la chaqueta de Louis, abrazando y besando a Louis. Michelle se aferraba a Jackie, que ya estaba vestido, llorando a lágrima viva. Luego, por allá se encontraba Brad, atado y gimiendo excitado sobre la cama con una expresión dichosa.

Un pervertido sin duda.

—Le mostré una alucinación feliz. Le sugiero que contacte ahora mismo con los caballeros del Imperio para que lo recojan, señor.

Daniel respondió a mi mirada con una sonrisa.

¿Qué diantres es una “alucinación feliz”? Parece que sus deseos secretos son cumplidos en esa ilusión…

En cuanto a ese deseo…

¡¿Quién demonios es la pareja?!

Mientras temblaba de miedo, Daniel prosiguió a dar las malas noticias.

—Tal parece que Jessica-sama y Michelle-sama fueron drogadas con afrodisiacos. Por lo tanto, espero que Louis-sama y Jackie-sama consideren eso mientras se encargan de ellas. Si damos un mal paso, sus futuros recibirán un gran golpe, así que por favor cuídenlas.

Tras recibir las noticias, Louis y Jackie rápidamente se excusaron y salieron, cargando a Jessica y Michelle en sus brazos.

Pensé «les tengo un poco de envidia» luego de verlos. Soy realmente un rufián.

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Notas de la autora: El protagonista es un rufián bueno para para nada. Aunque, opino que está bien.

Notas de Clixea: pues sí, pese a las advertencias de la autora, el capítulo básicamente fue Kyle besando a Angélica… Tampoco olvidemos que la única persona que realmente hizo algo fue Daniel, a veces pienso que Kyle deja mucho que desear como protagonista. Oh, bueno, es una web novel así que la autora no tiene tanta experiencia en cosas como esa.