Familia Ractos c89

Capítulo 89: Situación crítica

La escuela continental: el complejo académico Diebold, una escuela que cuenta con unos novecientos estudiantes inscritos.

Debido al sistema de dormitorios, los estudiantes la mayor parte del tiempo pasan sus días en los terrenos de la escuela excepto cuando tienen vacaciones largas.

Por esa razón, y como en cualquier otra escuela, ésta también contaba con un espacio exclusivo donde los estudiantes podían almorzar. Este lugar, llamado habitualmente la cafetería de la escuela, no era como una cafetería normal y corriente a la que iría un plebeyo, pues casi todos los estudiantes de esta escuela eran nobles.

Además, más que tener un abundante menú de donde escoger, en esta cafetería se les daba un menú limitado a ciertas opciones cada día del cual podía elegir los estudiantes, convirtiendo a este lugar en algo más parecido a un restaurante que cualquier otra cosa.

Los estudiantes entraban a este salón limpio y arreglado, buscaban mesas libres antes de elegir la comida del menú y luego decidían las porciones. El mesero traía después la comida tal y como la ordenaron a su mesa.

Comer es una acción de la que ningún ser vivo se escapa.

Además para los humanos también servía como un medio de entretenimiento, confort y en ocasiones un lugar para encontrar estímulos.

Seguramente la mayoría de los humanos respondería que el sabor era lo más importante cuando se trataba de la comida. Sin embargo, había otra cosa igual de importante que eso.

«Un ambiente donde comer sin sentirse amenazados».

Sin importar que tan deliciosa sea una comida, sería imposible para alguien disfrutar de la misma si estuvieran constantemente inundados con un sentimiento de intranquilidad. Bajo esa condición en la que no sería el momento apropiado para comer, tal y como se declaró anteriormente, ninguna persona sería capaz de comer algo.

… Justo ahora, al medio día, durante la hora del receso; la escuela continental: el complejo académico Diebold se encontraba en “una situación no apropiada para comer”.

—Waah, qué inusual, eh. Aun cuando mi hermana mayor siempre es la primera en comer. Pensar que los tres podríamos almorzar juntos fuera de casa, ¿quién lo habría imaginado, cierto?

—¡Tienes razón! ¡Cómo no estamos en casa, me sentí un poco extraña sobre esto!

—… Sí.

Las tres personas que acababan de hablar se encontraban sentadas en una mesa alejada de la muchedumbre, dando la impresión de querer evitar a las personas… Pero, eran las personas las que intentaban alejarse de esos tres. Además, la forma en cómo se distanciaron no fue como si quisieran evitar verse involucrados, sino que se encontraban a una distancia que tomarían dos guerreros justo antes de su pelea a muerte en la arena.

Algo bastante evidente si considerábamos a esas tres personas sentadas en medio del vórtice, aquellos que eran las personas más famosas en la Academia.

Daria=Ractos. Departamento de nobles de largo plazo y líder de la facción Daria.

Grisis=Diebold=Ractos=Nizzet=Ractos. Departamento de investigación de magia y «El Hechicero Loco».

Sera=Ractos. Departamento de nobles de corto plazo y la hija preciada de los Ractos.

Tal y como indicaban sus nombres, los tres eran hermanos y hermanas de sangre.

Si hermanos de una misma Casa se reunieran para comer juntos en la misma mesa, si solo fuera eso lo que sucedía, entonces no sería un evento extraño y no causaría que las personas a su alrededor estuvieran a la defensiva de esta forma.

… Eso es, si excluimos el hecho de que los tres hermanos de los Ractos eran hostiles entre sí.

Así es, esos tres… Los tres hijos de la Casa Ractos eran como perros y gatos.

La hija mayor, Daria, tenía un complejo por haber nacido sin ningún talento. Bajo la doctrina “Un talento que conseguimos cuando nacemos no es lo que nos vuelve nobles”, ella lideraba la “Facción Daria” y había desarrollado un plan para destruir a los otros dos que nacieron bajo la estrella de la fortuna.

En cuanto al hermano mayor, Grisis, nació con todo lo que una persona se podría imaginar. Pero lo único que había pensado que era suyo por derecho, la posición como el siguiente Duque de la Casa, le fue arrebatado por su hermana menor. Lo que lo llevó a la locura.

La más joven, Sera, creció siendo mimada por los adultos a su alrededor y protegida de las perversiones del mundo real. Actuaba como una niña ingenua que no sabía nada y nunca tomaba en consideración los sentimientos de sus hermanos.

Los tres ocultaban su verdadero yo y actuaban como hermanos que se llevaban bien entre ellos mientras compartían la mesa y almorzaban juntos. Por eso no se podía evitar que los otros estudiantes a su alrededor también se vieran absorbidos por la tensión.

—Oh, es verdad, Sera. ¿Cómo te va en la escuela? ¿Ya te acostumbraste a estar aquí?

—Umm… Esta todavía no memoriza todos los asentamientos de los salones, creo que esta necesitará más tiempo. Tú entraste en el curso de investigación de magia, ¿no es así, hermano? Esta no entiende nada de magia, así que el conocimiento de esta sobre la magia es casi nulo; pero, ¿qué haces exactamente cuando llevas a cabo experimentos de magia?

—No puedo explicarlo en una sola palabra, sabes… Pero simplemente experimento con todo. Pruebo cada posibilidad para saber el resultado de “¿qué pasaría si?” y “¿por qué?”, a eso yo llamo un experimento, ¿creo?

Hasta este punto parecería como una hermanita hablando sobre sus actividades recientes a su hermano. Una charla normal entre hermanos. Por eso, el resto de los estudiantes que estaban en medio de sus almuerzos no dejaron de mover sus manos y continuaron con su comida pacíficamente.

Sin embargo, la realidad no era tan dulce como para que terminara de una forma tan pacífica.

—Pero tengo que admitir que es gracias a Sera por heredar el ducado en mi lugar que puedo pasar todo mi tiempo haciendo experimentos aun cuando soy el hijo mayor. Aunque estamos en un lugar público, me gustaría darte las gracias. Te agradezco de todo corazón que hayas tomado mi lugar.

Todos los que oyeron eso sintieron como si el tiempo se hubiera detenido. Y no solo era una metáfora. Si mirabas de cerca, las personas realmente habían dejado de moverse, como si el tiempo se hubiera detenido para ellos. Había gente con sus manos en medio del aire a punto de llevarse la comida a la boca, otros que estaban a mitad de limpiar sus bocas con una servilleta y unos cuantos que estaban a punto de tomar asiento.

Todos se detuvieron, incluso dejaron de emitir ruido alguno.

—¡Por favor no digas eso, hermano mayor! ¡El poder de esta es necesario, por eso he llegado tan lejos, no tienes por qué preocuparte por nada, hermano! ¡En realidad no me siento ni un poco descontenta por todo esto!

Era tan claro como el agua que el rostro de las personas que habían dejado de moverse, estaba más pálido que antes, como si la sangre hubiera dejado de recorrer su cuerpo.

No se podía evitar. Después de todo, acababan de escuchar una conversación llena de sarcasmo… Una conversación sobre la herencia en un lugar público justo frente a sus ojos. Todos tenían la certeza de que Sera=Ractos no lo decía en serio, pero la forma en qué eligió sus palabras fue como arrojar leños al fuego.

—¿En serio? En ese caso, estoy feliz por ti… ¡Ki! ¡Kahya Hyahyaa!

Grisis comenzó a reírse como un demente mientras las comisuras de su boca se elevaban, dividiendo su boca en dos. Tenía los ojos abiertos de par en par y la luz que se reflejaba de sus irises con patrones de canica resplandeció de manera sospechosa.

Aunque no fue dirigida a ellos, la atmósfera intimidante que Grisis emitía dificultada que los estudiantes incluso trataran de huir de la cafetería.

—Grisis… Cierra la, boca… —dijo una voz tan clara como el día. Aun frente a la risa maníaca de Grisis que retumbaba en medio de la cafetería—. Estamos en la cafetería… tienes el mal hábito… de no fijarte… en tus alrededores, ¿no?

Los ojos que miraron con brusquedad a esos irises de canica, pertenecían a la hija mayor, Daria. Gracias al tono que parecía que no aceptaría ninguna objeción, la risa de Grisis comenzó a calmarse.

—Ups, no está bien, no está bien. Lo siento, hermana mayor, parece que me emocioné mucho.

Gracias a sus palabras, el miedo que había provocado su locura desapareció. Grisis también siguió el consejo de Daria y corrigió su postura hasta parecer una persona cuerda, salvo por el color de su cabello.

—Pero, hermana mayor, creo que necesitas hablar más, ¿sabes? Si continúas igual de taciturna, las personas pensaran que no puedes hablar, ¿sabes?

Esa frase que no se podía considerar otra cosa más que descortés, provino de la boca de Grisis, haciendo que la cafetería se llena de pronto con una tormenta de sed de sangre. Algo que la propia facción Daria se encargó de emitir.

—Ooh, ¿por qué de repente hace más frío, eh? ¿Me pregunto si se aproxima una tormenta? En fin, supongo que solo será una pequeña llovizna.

A pesar de eso, Grisis no mostró señales de ceder, al contrario, atrajo más su atención y decidió burlarse de ellos. Usando palabras para recordarles que su bisabuelo, Diebold=Ractos, derrotó al Rey Hechicero de las Tormentas y ascendió a la posición de Rey Hechicero al hacerlo. Para Grisis, que se decía era el siguiente Diebold=Ractos, las personas de la facción Daria solo eran una fracción de una tormenta, una pequeña llovizna que ni siquiera sería capaz de mojarlo sin importar cuántos de ellos fuesen.

La verdad es que, incluso si todas las personas de la facción Daria en ese lugar atacaban al mismo tiempo a Grisis, sabían que serían derrotados fácilmente, así que la atmósfera de la cafetería volvió a tensarse.

Y exactamente en ese momento.

… El sonido de la campana retumbó por la escuela.

Ese sonido, que provenía de la campana ubicada en la torre más alta de la Academia Diebold, marcaba el final del receso vespertino.

—… La campana.

—Ooh, qué rápido pasa el tiempo cuando uno se divierte, eh.

—¡Estuvo delicioso! ¡La próxima vez esta probará el pollo!

Los tres principales culpables de todos los acontecimientos, parecían ya haber terminado de comer a pesar de haber estado peleándose entre ellos, pues se levantaron de sus asientos.

La tensión dentro de la cafetería disminuyó un poco gracias a esa acción.

—Pues bien, hermana mayor, tengo que regresar al edificio de experimentación. Continuemos esta charla después, ¿te parece?

—… Está bien… Dejémoslo para después…

—¡Hurra! ¡Fue divertido almorzar junto a mis hermanos después de mucho tiempo!

Tras decir eso, los tres terminaron de recoger sus cosas y caminaron en diferentes direcciones.

Sin embargo, no es como si esto marcara el final de su pelea.

Simplemente se habían quedado sin tiempo.

Los estudiantes que finalmente fueron liberados de la presión solo podían rezar para no verse envueltos la próxima vez.

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Y hasta aquí llega la historia de la familia Ractos, técnicamente hay un capítulo más pero nadie logró rescatarlo antes de que fuera eliminado por el autor. Tampoco le fue bien a la novela y se terminó en el tomo 2, así que lamentablemente esta historia jamás tendrá un final T-T Este autor es muy cruel, primero mata a varias personajes y luego elimina cualquier rastro de la existencia de esta web novel. Sus motivos habrá tenido, pero como fans no deja de ser una desgracia.

Al menos esto me sirvió de experiencia y de ahora en adelante solo tomaré proyectos que estén terminados, salvo me encante mucho la historia como Baccano! que sigue activa o Reika-sama que está en pausa indefinida por el autor.

PD: Y hasta el final, este proyecto nunca dejó de ser teaser XD